Ropa sucia afuera: A la Casa de Gobierno, No la manejan las corporaciones.

 "No os dejéis arrastrar a la catástrofe. Si os empujan, sublevaos.

Muramos por la libertad de la Patria y no al servicio de los patrones extranjeros"

Raúl Scalabrini Ortiz

Realmente es de un carácter mercenario y cipayo, inédito. Por lo menos inédito en mi corta edad de lector de diarios. Es la tomada de pelo inagotable; es un intento cobarde de sumergir en la indiferencia y en la ignorancia a los lectores cotidianos del medio gráfico. Es aberrante, impúdica y flagrante, la operación de las corporaciones mediáticas para callar lo inevitable, lo innegable. Para apagar una llama que se extiende y que difícilmente puedan apagar, fragmentar o desaparecer.

¡Cuánta incapacidad desparramada en esos periodistas a sueldo que trabajan a destajo, por unas chirolas o por ilusiones de riqueza inmediata para rápidamente, después del gran discurso de una mujer que se está constituyendo como la segunda gran estadista de la democracia joven de nuestro país, intentar de una manera torpe, carente de creatividad para encontrar argumentos críticos, dominada por el vestigio de un periodismo que dista horrores de ser independiente, digo intentar erosionar la solidez estructural del orgullo por lo hecho bien, del reconocimiento por lo que falta hacer y de la valentía para poner el pecho y ahí donde no se llegó, meter ideas y proyectos a futuro!

Trato de ser objetivo de alguna manera, pero me cuesta porque no soy solo un sociólogo. Soy un ciudadano; un joven montaraz de la política hecha de acción, esa política que es para nosotros, porque además de sociólogo y político, soy Pueblo. Y hoy, la paradoja del destino, me encuentra siendo Joven y Pueblo al mismo tiempo. Y ese amor que se despierta en mi pecho, es porque veo a mi Pueblo otra vez de pié. Y es amor propio, liberado. Porque veo a mis colegas trabajando para el pueblo. Porque veo a los jóvenes, y me veo, sosteniendo con el alma la conquista histórica de un nuevo rumbo. Y ese amor propio, me trae el alivio y la paciencia. Y los invito a todos los que quieran leer: oficialistas, indecisos, y opositores….

Porque minutos después, del discurso de apertura del año legislativo en el Congreso, a cargo de la Presidenta, reflexioné sobre sus palabras, sus gestos y la dirección de cada uno de sus argumentos. Porque, a diferencia del discurso del Señor Jefe de Gobierno de la Ciudad, Cristina Fernández de Kirchner, desplegó todas sus herramientas discursivas para realizar un discurso inclusivo, abierto, universal, sensato y audaz en sus principales anuncios.  A metros del Congreso, en la Legislatura, la frivolidad irrecuperable del Jefe de Gobierno porteño, escupía promesas desgajadas de los tres o cuatro ministerios que Durán Barba le recomendó transitar para no entorpecer la campaña electoral incipiente.

Nada habló de viviendas, nada habló la crisis del espacio público que en este blog he tratado brevemente, nada habló de los problemas estructurales de la salud y la educación a excepción de un vericueto de educación digital que no supo explicar, porque no le interesa realmente hacerlo, y no hubo mención sobre uno de los pilares de la política porteña, que es la cultura. Nada. Vacío y frío. Ni siquiera la administración del Dr. De La Rúa, fue tan pobre de contenido como la que atravesamos los porteños con el Sr. Mauricio Macri. Y esto es una opinión netamente personal.

Entonces decía que reflexioné: reflexioné sobre la ampliación de la Asignación Universal por Hijo, y su dimensión fuertemente inclusiva; reflexioné sobre el triunfo de lo político civil sobre lo policial, la política y la palabra frente a la represión y los discursos netamente punitivos; reflexioné sobre la educación, sobre la salud, sobre la energía; reflexioné sobre el impacto de la Ley de Matrimonio Igualitario y sobre la esperanza de una nueva Ley de Adopción; reflexioné sobre la fuerza de las ideas como alternativa a la mano dura; reflexioné sobre el pedido de legislar, a aquellos que parecía que iban a revolucionar el Congreso y solo sumaron ambiciones destructivas, lejanas a los reales intereses populares. Reflexioné sobre el liderazgo de la Argentina en este camino deseado de conseguir la Patria Grande Latinoamericana. Reflexioné sobre la nueva de Ley de Medios Audiovisuales y el orgullo que sentí cuando mi esposa recibió su carné de Operación Técnica para Radio, por la suerte del destino de lograrlo en este momento. Reflexioné mucho más. Mucho.Y la reflexión nos permite mirar hacia delante y alentar el pensamiento crítico. Y a través de la reflexión genuina y sincera, el opositor, debe aceptar la invitación de la fuerza gobernante, para ocupar el espacio correspondiente en la construcción de nuestra Argentina. Solo unos pocos y valientes dirigentes opositores se atreven a atender el llamado popular de los que piensan distinto. Pero el resto…

Y el resto se da a través de la infamia. Surge desde el odio, desde lo más profundo del odio. Porque hay un pueblo que elige hoy otro camino. Pero ellos no saben tolerar a la historia. Y por eso durante siglos la han escrito y manipulado a su medida. Y es por eso que, a través de sus operadores políticos, reproductores  de las clases dominantes poseedoras de los discursos hegemónicos históricos,  intentan disminuir, achatar, reducir, difamar, agredir y destruir, cualquier cuestión que supere su limitada capacidad de análisis comprensivo.

Y es ahí, Compañero, Colega, Amigo u Opositor, cuando lamentablemente una buena cantidad de gente te dirá mañana en la calle, en el trabajo, en el bar o en el club, alguna de las siguientes zonceras. Recuerden que este Blog, intenta recuperar los conceptos del pensamiento nacional, y éste concepto “zoncera” expuesto por Jauretche, es bien autóctono y práctico para la ocasión.

1)     Dirán sobre la ampliación de la AUH, que las mujeres de las clases populares incurrirán en embarazos a granel, solo para cobrar unos mangos más de asignación.

2)     Dirán que la Presidenta está loca porque cree que bajó el delito siendo que a cada rato en la tele muestran un muerto: salimos, mas no sabemos si volvemos porque nos están matando todos los días.

3)     Dirán que la Presidenta es débil porque no se postuló aún para la segunda presidencia, ya que debe querer aprovechar la herencia que le dejó Néstor.

4)     Dirán que es autoritaria por retar a Cobos, pobre hombre, que encima tiene que estar ahí de vicepresidente, lo bardean.

5)     Dirán que se peleó con los sindicatos, porque se quiere hacer la que los enfrenta.

6)     Dirán que no habló de la inflación, porque no le conviene.

7)     Dirán que nada de eso que dijo es real, porque este país es una mierda.

Y esas son las puntas de lanza que desparrama en ese híbrido denominado opinión pública, el cipayaje grosero y atolondrado liderado por el Grupo Clarín y diarios como La Nación, Perfil, y otros medios gráficos y audiovisuales. Las inmediatas noticias publicadas segundos después de la finalización del discurso, reflejan la pobreza analítica de este periodismo tirano y paria. Los contenidos mas profundos de las palabras de la Presidenta, fueron automáticamente reemplazados por tópicos que se corresponden con los caballitos de batalla desgastados, a través de los cuales, encuestan a una ínfima cantidad de lectores, usuarios activos de Internet, y resulta de esa macana, una deducción fantasmagórica de lo que “piensa la gente” de tal o cual asunto. La profundización de la inclusión social, la reglamentación del trabajador rural, el tratamiento de leyes fundamentales, y tantas otras cosas jugosas para el análisis, quedan sepultadas bajo la óptica de líneas editoriales asquerosamente ciegas en la defensa de sus estrechos intereses disminuidos y de periodistas ávidos de un pedacito pequeñísimo de carne para desgarrar. Pero hay tanta espalda para aguantar el embate, que van a tener que comprar mucha dentadura nueva y corrupta, y aún así no les va a alcanzar. Para estos medios periodísticos grotescos fue más importante en su contenido, la desmentida de la reelección eterna, un invento desordenado del Grupo Clarín, o el reto al traidor, que todo lo anterior.

Así que Compañeros, Colegas, Amigos, y Adversarios, mañana, calma y paciencia. Y a las zonceras, argumentos. Pero nunca perder de vista el pensamiento crítico, siempre desde una perspectiva Nacional y Popular. Porque como dijo la Presidenta, para el lector de Clarín o La Nación, que seguro no lo leyó:

“…a la Casa de Gobierno, no la manejan las corporaciones…”